Firmado por MARÍA EUGENIA ANTA, Directora de Tutela de Producto, Comercio e Internacionalización
El 31 de mayo finaliza el plazo de registro en la Agencia Europea de Productos Químicos (ECHA) de todas las sustancias químicas producidas o importadas en la Unión Europea en cantidades comprendidas entre 1 y 100 toneladas, según los plazos que contempla la legislación REACH.
Tras 10 años de aplicación, REACH se sitúa como la normativa más compleja desarrollada hasta el momento por la Unión Europea, que establece las normas más estrictas en cuanto a protección de la salud, la seguridad y el medio ambiente.
Hoy se conocen mucho mejor los productos químicos que utilizamos y las empresas han hecho sus deberes, evaluando y gestionando los riesgos de los productos que ponen en el mercado. Ya se han registrado más de 80.000 expedientes de registros en Europa, casi un 75% de los cuales son el resultado de sustancias importadas como tales, en mezclas o contenidas en artículos. En el caso de España, más de 800 empresas, la mayoría fabricantes, han remitido información en 5.000 expedientes de registro, correspondientes a casi 3.000 sustancias.
El registro sólo es el inicio del proceso establecido por REACH, ya que la ciencia evoluciona, los productos cambian, se desarrollan nuevos productos químicos, nuevos usos y las empresas deben mantener actualizada la información sobre sus productos químicos remitida a ECHA.
Además esta información remitida será utilizada, tanto por ECHA como los Estados miembros y la Comisión Europea, para tomar medidas y garantizar la protección de la salud humana y el medio ambiente, cuando sea necesario, proponiendo restricciones, autorizaciones o la armonización de clasificación de una sustancia.
Con la normativa REACH, la Unión Europea se ha posicionado como modelo a seguir en el ámbito mundial en cuanto a la gestión de la seguridad de los productos químicos, ya que disponer de la información sobre los productos de una manera integrada, potencia su uso seguro en toda la cadena de suministro, mejorando la seguridad de los trabajadores y del consumidor final.