La divulgadora científica, investigadora y química Deborah García Bello ha destacado en Smart Chemistry Smart Future la necesidad de «impulsar la cultura del conocimiento frente al desconocimiento global», para conseguir una sociedad informada que sepa identificar y valorar el papel indispensable de especialidades científicas e industriales, como la química, que intervienen de manera positiva en nuestra vida y entorno, de cara a conseguir alcanzar los retos a los que nos enfrentamos como humanidad a todos los niveles. Ha puesto como ejemplo la COVID-19 u otras pandemias, el desafío energético, el cuidado del medioambiente o las potenciales demandas de una población mundial creciente, que necesitará acceder a recursos de primera necesidad como el agua o una alimentación adecuada, cuya garantía vendrá de mano de la innovación científica, industrial y tecnológica que proporcione, en buena parte, la química.
Durante su intervención, Deborah García Bello ha compartido su experiencia para demostrar como la química está en todas partes y es fundamental para alcanzar una economía circular, a través de la reutilización de residuos, algo en lo que la química lleva décadas trabajando: «La economía circular o lo uqe es lo mismo: convertir residuos en recursos, es algo que llevamos haciendo mucho tiempo sin darnos mucha cuenta y en todos los procesos, interviene la química».
Asimismo, ha querido señalar que, para avanzar como sociedad en conjunto es fundamental la formación y el conocimeinto. Actualmente, diferentes indicadores señalan que la sociedad española cuenta con nociones muy pobres de ciencia y tecnología, lo que motiva un cierto desconocimeinto en áreas tan clave para nuestra vida como es la química: “Más de la mitad de la población no entiende una noticia de Ciencia. El compromiso de los ODS debe ir alineado con compartir el conocimiento científico y que la gente conozca lo que la quimica hace para mejorar la vida de las personas».
En este sentido, Deborah García Bello ha señalado que la química cuenta con un gran problema de base en las aulas, donde la materia no está impartida de manera atractiva o mínimamente comprensible en el entorno habitual de los alumnos: «es un problema que no se enseñe a los alumnos a identificar la química en su entorno cercano. Todo es química y antes de aprender a formular, se debería enseñar a los jóvenes a ver cómo la puesta en práctica de la química interviene de manera positiva en la vida de las personas y en el cuidado del planeta. Este hecho genera desmotivación y hace que pierdan el interés para seguir profundizando en materias de ciencia como la química».
Por último, la divulgadora ha querido remarcar la especial problemática de las mujeres en la Ciencia: «el problema de las mujeres en ciencia es de conciliación. Todo es vida: profesional y personal. Las mujeres siguen siendo cuidadoras y eso no se puede arrebatar. No podemos hacer que tengan que decidir entre carrera profesional o desarrollo personal ni hacer de menos lo más importante de la vida, como si fueran cosas diferentes».
La charla de Deborah García Bello ha servido como colofón de Smart Chemistry Smart Future, donde bajo el lema “Welcome to 2030” compañías líderes de la industria química española han presentado los productos y tecnologías punteras que están desarrollando y que dan respuesta a los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por Naciones Unidas en su Agenda 2030, así como a los principales desafíos recogidos en el Pacto Verde Europeo.